Probablemente no sea lo primero que se nos viene a la mente cuando pensamos en la recuperación del cáncer, pero la fisioterapia se está convirtiendo en una parte cada vez más importante y beneficiosa de la rehabilitación del cáncer. La Sociedad Estadounidense del Cáncer recomienda tanto a los pacientes con cáncer como a los supervivientes de cáncer que realicen actividades físicas para ayudar a mejorar su capacidad de realizar las actividades diarias y aumentar su riesgo de supervivencia.
Los fisioterapeutas pueden crear un plan de tratamiento individualizado para los pacientes en todas las etapas de la recuperación del cáncer. En particular, en lo que respecta al cáncer de mama, la fisioterapia puede ayudar a mejorar la recuperación y minimizar los efectos secundarios.
El cáncer de mama es un desafío y puede ser físicamente agotador incluso después de la cirugía. Por lo general, las pacientes tendrán dificultades para recuperar un rango completo de movimiento en la articulación del hombro y sentirán dolor en el brazo, el hombro y el pecho. A menudo, puede inhibir su capacidad para realizar actividades diarias como vestirse y ducharse, e incluso respirar profundamente. Estos ejercicios simples pueden ser beneficiosos para su recuperación y probablemente serán parte de su plan de tratamiento individualizado por parte de su terapeuta.
Al principio, las actividades sencillas de amplitud de movimiento y los estiramientos serán los más beneficiosos para su recuperación. Mantener el brazo elevado por encima del corazón mientras está acostado puede ser beneficioso para reducir la hinchazón en el área afectada. Abrir y cerrar la mano y doblar y estirar el codo también pueden ayudar a reducir la hinchazón. Además, los ejercicios de respiración profunda pueden ayudar a estirar el pecho y mantener los pulmones activos al principio de la recuperación.
Unos días o semanas después de la cirugía, el dolor y la hinchazón deberían disminuir, y se introducirán nuevos ejercicios para mejorar el movimiento y reducir el dolor. El primero se llama "ala de codos", en el que te recuestas boca arriba con los dedos entrelazados detrás de la cabeza y mueves los codos hacia el suelo. Este ejercicio ayuda a aumentar el movimiento del hombro y el pecho. No te desanimes, debería llevar semanas poder mover el hombro hasta el fondo.
También puedes intentar el estiramiento de hombros. Para este ejercicio, te colocarás a unos 25 centímetros de la pared con las manos apoyadas en la pared a la altura de los hombros. Usa los dedos para subir las manos y los brazos por la pared y volver a bajar. Este ejercicio se utiliza principalmente para ayudar a aumentar el rango de movimiento del hombro.
Otro ejercicio similar consiste en sentarse en una silla cerca de una mesa con ambas palmas sobre ella. Luego, utilizará un método similar para arrastrar el brazo afectado lo más que pueda por la mesa para estirar el omóplato.
Su médico y fisioterapeuta se consultarán para elaborar el plan de tratamiento que mejor se adapte a usted y a sus necesidades individuales, por lo que algunos de estos ejercicios pueden no estar incluidos, aunque puede haber una variedad de ejercicios diferentes que utilice a lo largo de su tratamiento.
En ACCESS PT, nos dedicamos a ayudar a nuestros pacientes a sentirse lo mejor posible. Si necesita asesoramiento o ayuda para volver a sentirse lo mejor posible, comuníquese con uno de nuestros Más de 50 ubicaciones¡Nos encantaría poder ayudarte!